España es uno de los principales países productores y exportadores de aceite de oliva virgen después de Italia. Al cierre del año 2015, las exportaciones españolas de aceite de oliva virgen sumaron un total de 2,144 millones de dólares, lo que representa un 0,7% por ciento de la oferta exportable de España.
El mercado de aceite de oliva virgen español es principalmente intracomunitario, esto debido a que el 69 por ciento de los envíos españoles de aceite de oliva se destinan a los países miembros de la Unión Europea, principalmente Italia, Francia y Portugal. Luego, tenemos a los países de Asia, que concentran el 13 por ciento de la oferta española de aceite de oliva virgen. Los principales destinos son China y Japón. Por otra parte, un 5 por ciento de la oferta española de aceite de oliva virgen tiene como destino los países de América Latina.
Las exportaciones españolas de aceite de oliva virgen a América Latina suman un total de 114.8 millones de dólares, generadas por alrededor de 82 empresas. Entre las empresas exportadoras tenemos a Aceites Borges Pont S.A., Deoleo S.A., Almazaras de la Subbetica S.L., Aceites Noguero S.L., entre otros.
El aceite de oliva español llega a todos los países de América Latina, siendo los principales destinos Brasil, México y Colombia. Los tres países concentran alrededor del 80.3 por ciento de los envíos españoles de aceite de oliva virgen en la región.
Brasil se ubica como el principal destino de las exportaciones españolas de aceite de oliva virgen en la región, con una participación del 38.2 por ciento, lo que equivale a 43 millones de dólares. España es el segundo proveedor de aceite de oliva en Brasil con una participación del 22 por ciento, por debajo de Portugal, que cuenta con una participación del 57 por ciento.
México se ubica con una participación de 21.7 por ciento es el segundo destino de las exportaciones españolas de aceite de oliva a la región. Las exportaciones españolas de aceite de oliva virgen a México sumaron un total de 32.6 millones de dólares, ubicando a España como el principal proveedor de este producto en el país. España genera el 81 por ciento de las importaciones mexicanas de aceite de oliva virgen, mientras Italia en segundo lugar, solo genera el 15 por ciento.
Colombia se ubica como el cuarto destino de las exportaciones españolas de aceite de oliva virgen, con 10.9 millones de dólares lo que equivale al 9.5 por ciento de las exportaciones españolas de aceite de oliva virgen. España se ubica como el principal proveedor de aceite de oliva virgen, con un 65 por ciento, le siguen Chile e Italia con 13 y 12 por ciento respectivamente.
República Dominicana concentra 7 por ciento de las exportaciones españolas de aceite de oliva virgen, lo que equivale a 8.1 millones de dólares. España es el principal proveedor, con 87 por ciento de participación, muy debajo Italia, con 12 por ciento.
En quinto lugar, Panamá con una participación del 1.8 por ciento de las exportaciones españolas de aceite de oliva virgen. Las exportaciones españolas de aceite de oliva virgen a Panamá suma un total de 2.1 millones de dólares, lo que representa el 63 por ciento de las importaciones panameñas de aceite de oliva virgen. España es el principal proveedor, seguido de Italia, que cuenta con una participación del 34 por ciento.
El mercado de aceite de oliva en América Latina es muy minoritario en comparación con el del resto de aceites vegetales como el girasol y soja. Sin embargo, el producto se considera de lujo, por lo cual los precios son tradicionalmente altos.
El aceite de oliva en América Latina, puede catalogarse en términos generales en dos categoría: para el consumo directo o gourmet esto debido a la gran demanda de este producto en sus diferentes presentaciones, que en su gran mayoría se importa de España e Italia. Estos nos dan buenas perspectivas del producto y las oportunidades que presenta para las empresas productoras de aceite de oliva que buscan mercado en Latinoamérica.
Generalmente, el canal de distribución del aceite de oliva virgen en América Latina es un canal corto y estrecho. Es un canal corto porque existen pocos intermediarios entre el importador y el retailer o vendedor directo al consumidor final. En la mayoría de los casos, el propio importador es a la vez distribuidor y representante de las marcas de aceite que importa.
El empresario que desee comercializar aceite de oliva virgen en los supermercados de América Latina debe hacer una propuesta de valor superior a la que existe, ya sea en calidad, precio o innovación. Es decir contar con un producto diferenciado. Asimismo, recalco que a veces los compradores latinoamericanos se toman el riesgo por un producto siempre y cuando el proveedor vaya a invertir en una campaña publicitaria masiva.
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