El transporte marítimo es una industria masiva. Prácticamente cualquier negocio tiene contacto con los envíos por transporte marítimo internacional en algún punto.
Pero se trata de una industria compleja, así que si estás pensando en comenzar a usar el transporte marítimo para importar o exportar mercancías para tu negocio, hay muchos aspectos que tendrás que considerar e ideas equivocadas que sustituir.
Familiarizarte con estos hechos te ayudará a evitar sorpresas desagradables que podrían conducir a retrasos o extracostes innecesarios.
En este post, desmontaremos las principales ideas erróneas que corren en torno al transporte marítimo.
No es totalmente cierto.
Sí, los envíos de contenedor por transporte marítimo tienen sus costes.
Pero en comparación con otros modos de transporte internacional de mercancías, el transporte marítimo es definitivamente el más económico.
Por si no lo sabías, el transporte marítimo supone el 90% del comercio mundial. Dicho esto, es claramente la mejor opción y la más efectiva en cuanto a costes para los exportadores e importadores del todo el mundo.
Falso. Todo lo que quieres meter en un contenedor necesita estar listado en el packing list o lista de empaque, que luego será enviado a las aduanas para su inspección. Cada país tiene sus propias regulaciones para determinadas mercancías. Algunos productos pueden estar prohibidos, mientra sque otros pueden requerir de permisos o licencias especiales para entrar en el país. Por ejemplo, para enviar muebles de madera o productos empaquetados con madera, debes asegurarte de que el material ha sido previamente tratado
Nada más lejos de la realidad. Las tarifas de transporte marítimo, del mismo modo que las de los vuelos, fluctúan regularmente en el tiempo. Además están sujetas a muchos factores - muchos de ellos fuera de tu control. Entre estos se incluyen factores estacionales, políticos, o económicos (oferta y demanda).
Un factor que afecta significativamente a las tarifas de transporte marítimo de contenedores es el GRI o General Rate Increase. Se trata de subidas generalizadas en el precio del flete que aplican las navieras y normalmente afectan más intensamente a las rutas de importación desde el medio y lejano Oriente.
¡Mentira! Sólo entre el 2% y el 10% de contenedores son inspeccionados en todo el mundo. Pero no por eso puedes dar por sentado que tu envío se librará de una inspección.
La cifra es más alta tratándose de envíos que llegan a los Estados Unidos procedentes de otros países. Pero tampoco mucho - alrededor de un 5%. Las aduanas estadounidenses se han vuelto más restrictivas con el paso del tiempo, y dicho esto, deberías estar siempre preparado para la eventualidad de una inspección.
Lamentablemente, incorrecto. ¿Pensabas que podías planificar tu logística de acuerdo con la fecha estimada del buque? Piénsalo de nuevo. Planificar tu cadena de suministro de forma ajustada en base a la fecha estimada de llegada es sin duda un gran error. Las últimas cifras señalan que sólo el 74% de los buques llegan a tiempo. En otras palabras, uno de cada 4 envíos de transporte marítimo llega tarde.
Si dabas por sentado que las salidas de los buques suceden el día estimado, y las llegadas también, lamentamos informarte de que hay una multitud de factores inherentes a la naturaleza de esta industria que la convierten en objeto de retrasos. No siempre suceden, ni son la norma, pero hay que contar con ellos. Desastres naturales como un huracán o un tifón o problemas en el transbordo entre otros, pueden provocar que el buque llegue unos días más tarde de lo esperado.
El índice de fiabilidad de las navieras ha caído en el último año y todavía está recuperándose lentamente para alcanzar los niveles de puntualidad que tenía antes. Entre los factores detrás de este descenso podemos encontrar distintos desastres naturales, volúmenes de carga muy elevados o la adaptación a nuevas agendas comunes y buques compartidos tras la última reconfiguración de alianzas entre navieras.
Sí y no. Hemos repetido como un disco rayado, una y otra vez, que el transporte marítimo internacional es extremadamente complejo. Multitud de actores que intervienen en el proceso, diferentes procedimientos, normativas específicas para cada país o tipos de mercancías, retrasos y extracostes… Y no nos retractamos. Con toda la documentación que implica un envío de contenedor y los problemas potenciales que el envío podría sufrir, nunca podremos garantizar 100% que el envío llegará sin ninguna complicación.
Sin embargo, estas complejidades no son difíciles de superar. Escoge a un transitario de confianza para gestionar tu envío. Así las complicaciones serán minimizadas y evitarás complicaciones potenciales.
Artículos Relacionados