La exportación de productos es un paso ineludible para aquellas empresas que buscan tener presencia en nuevos mercados y aumentar el alcance de sus ventas. Sin embargo, si has importado o exportado en alguna ocasión, sabrás que esto aumenta los costes en tu inventario y tus informes financieros. En otras palabras: si compras un producto por 10 $, lo vendes por 20 $ y pagas otros 20 $ en costes de envío (por un artículo), pierdes dinero.
Landed Cost o Coste en Destino es un término que toda compañía que trate con importaciones y exportaciones debe conocer. Los precios del flete marítimo suelen ser bastante significativos, por lo que mantener los márgenes de beneficio es un reto que se puede alcanzar llevando a cabo un coste de producto completo y exhaustivo. Para ello, has de tener en cuenta cada uno de los costes asociados al envío de mercancía.
Saber hacer esto correctamente contribuirá sin duda al éxito de tu negocio y aquí te explicaremos cómo.
Coste en Destino (Landed Cost o Total Landed Cost en inglés) es el precio total de un producto hasta que llega a la puerta del comprador. Determina cuánto cuesta un producto desde su fabricación y su envío en un contenedor hasta que es recibido por tu cliente.
Este cálculo incluye todos los costes específicos asociados al envío de cada artículo, como el precio original del producto, los costes de envío o transporte, los impuestos, los aranceles y el despacho de aduanas, el seguro, las tarifas de embalaje, gestión y pagos e incluso el cambio de divisa. El total de estos gastos te permitirá definir el precio de venta más competitivo y establecer un margen de beneficio para cada producto.
Calcular tu Coste en Destino será un valor añadido para tu empresa por varias razones:
Calcular tu Landed Cost no es tarea fácil. Sin embargo, las consecuencias pueden ser importantes: si tu estimación es demasiado alta, tus cifras de venta pueden verse afectadas por el precio; si tu estimación es demasiado baja, puede reducirse el beneficio. Recuerda calcular siempre tu Landed Cost una vez tengas todos los costes finales.
La fórmula básica para su cálculo es la siguiente: Producto + Envío + Tasas de Aduana + Riesgo + Gastos Operativos = Landed Cost
Este es probablemente el factor más sencillo que tener en cuenta. Se refiere al precio neto que pagas a tu proveedor por un artículo e incluye el material y los componentes.
Si tienes algo de experiencia en envíos internacionales, sabrás que cada aspecto del proceso tiene un coste asociado. Además del precio del flete en sí, también tendrás que añadir los gastos de gestión o embalaje.
Los requisitos y las tasas de aduana varían en función del país ya que cada país cuenta con autoridad propia para monitorizar la mercancía que cruza sus fronteras.
Por tanto, las agencias aduaneras son las encargadas de establecer aranceles, tasas aplicables (por ejemplo, IVA) y otras tarifas.
Esto incluye todos los costes destinados a proteger tu empresa, tus empleados y tus clientes, por lo que se refiere a tus gastos en cuanto a seguros y garantías de calidad, por ejemplo.
El gasto final a tener en cuenta está relacionado con las operaciones: empleados, el coste de la diligencia debida y el tipo de cambio, entre otros.
Imagina que tu empresa, con base en EEUU, vende zapatillas. Compras 250 zapatillas por 10 $ cada una a tu proveedor (con sede en otro país), así que el precio final de tu compra es de 2.500 $. El arancel es del 2% por lo que el precio del flete es de 500 $; el seguro es 100 $** y pagas 5 $ por cada paquete enviado a clientes. Aunque la transacción se ha llevado a cabo en dólares estadounidenses, se te cobra una tarifa de procesamiento de pago de 2 $ por artículo.
Este es el resumen de tus costes netos hasta ahora:
Por tanto, tu Landed Cost es: 10 $ + 2 $ + 0.20 $ + 5.40 $ + 2 $ = 19.60 $
En este caso, para alcanzar rentabilidad, deberás vender cada par de zapatillas por 19,60 $ y aumentar esta cifra afín de obtener beneficio.
La eficiencia de inventario es un punto débil común en el balance final de las empresas y, en el caso de las compañías exportadoras o importadoras, se debe principalmente a errores en el cálculo de Landed Cost.
Aunque el ejemplo que te ofrecemos en este artículo está calculado en base a cada unidad, puede ser más útil hacerlo por tandas. Sin embargo, recuerda que esto junto a cualquier coste inesperado que pueda surgir durante el envío podrá resultar en fluctuaciones del total de tu Landed Cost, algo completamente normal.
El punto clave en el que las empresas exportadoras e importadoras deben concentrarse es el seguimiento (cuanto más exhaustivo, mejor) de cada gasto relacionado con el suministro y envío de productos para así garantizar beneficios.
Estar al día con las fluctuaciones de las tarifas de transporte marítimo será sin duda otra gran ayuda para tus exportaciones e importaciones. ¡Echa un vistazo a la evolución de las tarifas en 2019!
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