En una mudanza realizada por transporte marítimo se pueden enviar todo tipo de enseres personales, muebles, menaje del hogar y cuberterías, electrodomésticos, libros, juguetes, ropa, instrumentos musicales, aparatos electrónicos, coches, motos y, en general, cualquier objeto que no sea inflamable o peligroso.
Debido a las características propias del transporte marítimo internacional y a las regulaciones propias de cada país, hay ciertos tipos de productos que no se pueden enviar en una mudanza internacional marítima.
En algunos destinos las restricciones podrían variar. En muchos países, por ejemplo, existen limitaciones específicas para el transporte de vehículos.
Además, ten en cuenta que en una mudanza internacional no puedes enviar mercancías a otro país con fines comerciales. En ese caso se trataría de una exportación o importación, no de una mudanza internacional, y los aspectos legales y fiscales serían distintos.
Eso implica que la persona que realiza el envío del contenedor con la mudanza en origen debe ser la misma que lo recoja en destino.
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